Un gigante dormido: Una forma tradicional de filantropía revive en Arabia Saudita
La palabra "Awqaf" no es familiar para los que no hablan árabe. Se pronuncia "AW-kaf" y significa "quedarse quieto, aguantar, no soltar".
También se refiere a una forma de donación filantrópica.
Fundados por el profeta Mahoma, los Awqaf existen desde hace siglos en el mundo musulmán. Un "Waqf" - la forma singular de este sustantivo - es una donación creada por un fundador con fines piadosos o para servir al interés público contribuyendo, por ejemplo, a la mitigación de la pobreza, al acceso a la educación, a la prestación de asistencia sanitaria o al despliegue de ayuda en casos de desastre.
En algunos países, los Awqaf no responden a los problemas sociales actuales, por lo que muchas de estas donaciones sean menos útiles de lo que podrían ser.
Un nuevo estudio explora el potencial de los Awqaf en la implementación de la Agenda Nacional de Transformación de Arabia Saudita y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) promovidos por las Naciones Unidas. El informe que se ha elaborado a partir de este estudio resulta del trabajo realizado por la ONU en Arabia Saudita en colaboración con la Corporación Islámica para el Desarrollo del Sector Privado, el brazo del Grupo del Banco Islámico de Desarrollo para la financiación del sector privado.
Este estudio forma parte de un esfuerzo destinado a despertar al "gigante dormido" que es Arabia Saudita y a ponerlo en la senda del desarrollo sostenible. En este artículo se abordan varias cuestiones importantes sobre los Awqaf:
¿Cuál es la historia de los Awqaf?
Los Awqaf fueron en el pasado parte integrante de las sociedades musulmanas. El patrimonio que representa un Waqf sigue generando dinero aún después del fallecimiento del donante. La práctica de los Awqaf tiene un importante significado religioso, ya que está vinculada a las palabras del Profeta Mahoma, que anima a realizar continuamente actos de caridad.
Uno de los primeros Awqaf fue establecido por un compañero del Profeta, Uthmán ibn Affán. Éste compró el pozo de Rumah, en Medina, justo después de que el Profeta se fuera de La Meca, hace más de 1.400 años, y lo donó a la población para que todo el mundo pudiera sacar agua de él gratuitamente y saciar su sed. Este pozo sigue proporcionando a los habitantes de la ciudad agua para beber y para regar las palmeras y los árboles.
¿Qué hace que los Awqaf sean especiales?
La práctica de los Awqaf comenzó a declinar en muchas partes del mundo musulmán durante el siglo XIX a medida que las potencias coloniales confiscaron las tierras objeto de dichas donaciones. Después, tras la ola de descolonización que se produjo en el siglo XX, los gobiernos descuidaron los Awqaf, lo que provocó un nuevo declive de la práctica.
Sin embargo, los Awqaf son permanentes. Ni el donante ni sus herederos pueden revocar la donación que han hecho si ya ha sido declarada como Waqf. Esta norma se ha establecido para garantizar que el Waqf se crea únicamente con fines filantrópicos y beneficia permanentemente a la comunidad.
El Waqf no se puede vender. Aunque los beneficios de la donación recaen a los seres humanos, se considera que la propiedad en sí ha sido devuelta a Dios. Nadie puede hacerse dueño de ella. El Waqf se convierte así en propiedad común. No se puede vender, hipotecar, regalar o heredar.
Algunos Awqaf son privados, es decir que el Waqf beneficia a individuos tales como los familiares de su fundador. Cuando los beneficiarios del Waqf fallecen, el Waqf beneficia a la población. La mayoría de los Awqaf, sin embargo, son principalmente públicos y sirven el interés público: Estos Awqaf pueden beneficiar a los pobres y vulnerables, por ejemplo. Otros Awqaf son mixtos o híbridos: En estos casos, el fundador dedica una parte del Waqf a su familia y otra a la comunidad.
¿Cómo se gestionan los Awqaf?
Los Awqaf pueden consistir en donaciones en efectivo, acciones en empresas o propiedades como mezquitas, terrenos, casas, hospitales, oficinas u otros edificios.
El fundador del Waqf determina la forma de gestión y administración del Waqf, así como las condiciones de herencia del mismo. Tradicionalmente, los gestores de los Awqaf, llamados "Nazir" [forma singular], eran particulares, generalmente familiares del fundador del Waqf. A lo largo de los años, el Estado ha asumido la gestión de algunos Awqaf, especialmente en los casos en los que la sucesión del Nazir no estaba clara.
Los Awqaf contemporáneos también pueden ser gestionados por consejos de administración o por profesionales que prestan servicios especializados, como gestores de carteras o administradores de propiedades.
¿Cuál es el potencial de Awqaf en el contexto de los ODS?
Los Awqaf con finalidad social tienen objetivos relevantes para la época en la que fueron lanzados. La gran mayoría de estos Awqaf se crearon antes de la llegada de los ODS y de la Visión 2030 del Reino de Arabia Saudita. Sin embargo, los objetivos de muchos Awqaf están alineados con estas agendas generales. El estudio realizado recientemente identifica el potencial de los Awqaf para alcanzar la Visión 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible:
En Arabia Saudita, los Awqaf desempeñan un papel fundamental en el cuidado de los grupos de población más vulnerables, como las mujeres, las personas con discapacidad y los huérfanos. Los esfuerzos realizados en este contexto están en consonancia con el ODS 10 sobre la reducción de las desigualdades.
Entre 2005 y 2007, las universidades fueron las primeras en utilizar los Awqaf para generar ingresos adicionales. La educación superior se menciona en la meta 4.3 del ODS 4.
En Arabia Saudita, algunos Awqaf se utilizan para financiar actividades alineadas con el ODS 11 sobre ciudades y comunidades sostenibles, en particular con la meta 4 de este ODS relacionada con la protección y salvaguarda del patrimonio cultural mundial.
Sin embargo, el estudio sobre los Awqaf indica que existen retos que deben superarse si se pretende aprovechar todo el potencial de los Awqaf. La dificultad radica en alinear los Awqaf con los objetivos, proyectos e inversiones de estas agendas modernas de desarrollo.
Si el sector de los Awqaf supera estos retos, los Awqaf recién creados podrían contribuir a la implementación de los ODS en Arabia Saudita, abordando las preocupaciones sociales y económicas actuales que existen en el país.
Imagínense lo que podría conseguir este gigante dormido, una vez revivido, al servicio de un desarrollo sostenible que no dejaría a nadie atrás.
Acceda al informe del reciente estudio sobre los Awqaf a través de este enlace.
Historia escrita originalmente en inglés por Sheema Baghabra. Apoyo editorial de Paul VanDeCarr, Oficina de Coordinación del Desarrollo (OCD). Traducción del inglés al español por la OCD. Para más información sobre el trabajo de las Naciones Unidas en Arabia Saudita, visite SaudiArabia.UN.org. Para saber más sobre los resultados de nuestro trabajo en este ámbito y en otros, lea el informe de la presidenta del GNUDS sobre la OCD.